Cuando se habla de turismo rural, especialmente en invierno, mucha gente lo asocia de manera exclusiva a las casitas rurales en pueblos abandonados, pero poca gente piensa en pasar unos días en un bungalow en invierno, rodeado de plena naturaleza.
Conoce a continuación algunas de las razones que hacen que dormir en un bungalow en invierno sea toda una experiencia.
La comodidad de este alojamiento
Los bungalows son alojamientos cómodos y acogedores. En la mayoría de campings están muy bien equipados con habitaciones, baño y cocina y son una forma económica de tener tu propia casa en la naturaleza con vistas a la playa o la montaña.
Disfrutar de unos días de relax
El bungalow es un alojamiento ideal para disfrutar de unos días de relax en plena naturaleza, un entorno natural privilegiado. En estas “viviendas temporales”, el confort está más que asegurado.
El mejor modo de hacer deporte
Dormir en un bungalow es una forma de estar en pleno contacto con la naturaleza, pero también de realizar actividades deportivas y de ocio en el mismo recinto. En los alrededores del camping suele haber rutas para BTT, de senderismo, empresas que realizan deportes de aventura, etc.
Lleva tu mascota contigo y no la dejes en ningún refugio
A diferencia de otros alojamientos, en muchos campings con bungalows admiten mascotas, y a buen seguro que tu amigo de cuatro patas se sentirá enormemente feliz de estar en contacto con la naturaleza.
Adaptados para todo tipo de necesidades
Y por último, si muchos de los bungalows admiten mascotas, eso significa que están adaptados para ir con familias, con amigos y por supuesto para una escapada romántica. Los niños disfrutarán de estar en contacto con la naturaleza, harán amigos y podrán realizar todo tipo de actividades de ocio y entretenimiento.